El movimiento del motor Este ejercicio, realizado por la pelvis, en retención de aire, despierta las partes dormidas para ponerlas de nuevo en actividad y armonizarlas. Al estudiar nuestras sensaciones, nuestras emociones o las imágenes que podemos recibir durante el ejercicio, gracias al Mantra Angélico, tenemos la posibilidad de recuperar nuestra fuerza vital y nuestra voluntad para avanzar en nuestra búsqueda espiritual con nuevo vigor y mayor entusiasmo.
(SEALIAH RECEPTIVA)