Inyección letal (versión francesa)

Sueño #1: Inyección letal

Soy un espectador de la escena. Sé que fui violada por mi padre, y un médico me mete en una cámara frigorífica para preservar mi cuerpo y matarme sin dejar rastro. No tengo emociones, soy fatalista. Parece que el médico también es culpable de mi violación. Escribe una receta y se la da a una enfermera.

Cuando lo lee, se sorprende porque hay que poner dos inyecciones y se pregunta por qué no hay una sola inyección letal. Comprende que la primera inyección está destinada a borrar las huellas de un niño de siete semanas, fruto de la violación... Se pone las dos inyecciones. Me siento triste por el bebé, pero no por mí... entonces me doy cuenta de que, al ser fruto de una violación, no podría haberlo conservado.

Sueño #2: El estudiante turbulento

Compartir: Soy profesor y estoy experimentando una dificultad con un alumno (Simón) de unos 10 años. En varias ocasiones, desde principios de año, ha perdido completamente el control de sí mismo, lo que ha creado situaciones complejas, a veces violentas. Cada vez me tomé el tiempo de discutir con él para tratar de entenderlo. Además, tuve varias reuniones con sus padres. En el último incidente, fui firme con él para que dejara sus actitudes tan disfuncionales. Informé a los padres de que Simon distorsiona habitualmente la realidad y las palabras de los adultos, incluso delante de ellos. Hubo un periodo más tranquilo.

Hace unos días, al día siguiente de una reunión con él y sus padres, en la que todos pudieron expresarse y en la que la energía era más serena (pude ver los esfuerzos que estaba haciendo y lo bien que había reparado su último desliz), no quiso venir más al colegio, viéndome como la causa de sus problemas. Esta situación me hizo cuestionarme mucho y no me sentía bien al principio de las vacaciones de Navidad. Me preocupé y, conociendo la ley de la resonancia, decidí preguntar al Cielo por qué estaba experimentando esta situación, qué necesitaba entender sobre ella y cómo podía mejorarla. Comparto tres sueños sobre los que me interesaría recibir alguna aclaración.

1er sueño: Me vi en el piso donde había vivido unos 10 años antes. Pasaba por aquí con mi mujer. Queríamos ducharnos. Las paredes estaban sucias y había moho. El propietario del piso (que es una persona que siempre tiene conflictos y suele ser fría) se dio cuenta de que estábamos en el piso y vino a vernos.

Sorprendentemente, era muy agradable. Nos dijo que podíamos terminar la ducha y que al final debíamos devolverle la llave. Entonces, fuera, delante del piso, estaba mi coche nuevo, (familiar) que estaba aparcado, pero en vez de ser blanco como en la realidad, era gris. En la puerta trasera izquierda, el coche había sido destrozado y la marca dejada tenía la forma de un cuadrado, con un símbolo negativo en él, que parecía algo así como una calavera y huesos cruzados.

2º sueño: El sueño tiene lugar en la calle. Hay un ejército y una lucha. Tengo que intervenir. Un hombre me apunta con su rifle, me pongo delante de él y siento su rifle contra mi estómago. Milagrosamente, no me dispara y sobrevivo. Consigo someterlo, y pido ayuda a las demás personas que me rodean con bastante intensidad. Todo el mundo está conmovido.

Entonces la hija de la señora Gómez (madre de un alumno de la escuela, que representa a una madre que va a menudo a dar clases, escucha poco lo que se le dice y hace aspavientos por muy poco) levanta una pistola hacia el cielo; le digo a la hija con bastante brusquedad que las armas ya han hecho bastante daño. La Sra. Gómez responde que no tengo energía para hablar con su hija. No me doy la vuelta, me voy y no quiero responder a eso.

Sueño 3: Estamos en el vestíbulo de una gran sala de conciertos en Ginebra. Un hombre se acerca a mí, caminando con muchos otros hombres detrás de él, como si quisiera intimidarme. Dice que si le digo que no me toque, puede seguir tocándome y que se impone.