Este ejercicio nos permite liberar las limitaciones en nuestro interior que aprisionan los estados de conciencia más hermosos que hay en nosotros. Al meditar, nos ayuda a recordar que originalmente, un recuerdo distorsionado como el miedo, la tristeza o la ira proviene de heridas más profundas que contienen un potencial cualitativo, un potencial angélico.
(CHAVAKHIAH EMISIVO)